Odio tus mollas asquerosas cuando se mueven a descompás con el resto de tu cuerpo
odio cuando hablas tan ñoña
odio esa cara de gato obeso que pones cuando ves películas románticas
odio cuando te crees mejor por tener un bocadillo de paté de atún y yo una barrita dietética
odio cuando le cortan los cojones a tu gata
pero sobre todo...
odio no poder odiáte... piggy... mmm QUE ME DÉHE
lunes, 10 de mayo de 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario